Una de las cosas que más nos gusta en Ciencia Divertida es investigar sobre misterios y dar con una explicación científica que justifique el motivo por el que suceden ciertos fenómenos. En esta ocasión vamos a hablar sobre una de las leyendas más famosas: el Triángulo de las Bermudas.

Se trata de una zona del océano Atlántico cercana a la costa norteamericana. Para ser exactos, ocupa una extensa área marítima franqueada por la península de Florida, Puerto Rico y Bermudas, formando lo que parece un triángulo.

Por lo que esta zona del océano se convirtió en noticia en el siglo XX fue por la gran cantidad de desapariciones  y accidentes de aviones y barcos que tuvieron lugar mientras volaban o navegaban en el Triángulo. Entre las décadas de 1940 y 1970 alrededor de 5 aviones se estrellaron en esta zona. Desde 1800, aproximadamente, cuando empieza a haber un registro, se han confirmado más de 10 hundimientos o desapariciones de barcos.

Uno de los casos más populares (y que fue muy alimentado por el misterio que los medios de comunicación querían dar para aumentar las ventas) fue el del vuelo 19, un escuadrón de la Marina de EEUU que se encontraba realizando unas maniobras de vuelo rutinarias por la zona. 5 aviones con sus 14 tripulantes desaparecieron sin dejar rastro. El Gobierno estadounidense envió un equipo de rescate con 13 personas y éste también desapareció. Nunca aparecieron los restos de los aviones ni los cuerpos.

Como este caso se han registrado muchos más, como buques de carga que informaban por radio que todo estaba bien y nunca llegaron a puerto, o aviones que pasaron por la zona diciendo que “se ve agua blanca, algo no va bien”. Está claro que muchas anécdotas e historias han sido alimentadas por el sensacionalismo de la prensa, pero es importante aclarar que a diario transitan por el Triángulo de las Bermudas numerosos cruceros y aviones sin que haya ningún inconveniente. Así pues, ¿dónde está la clave del misterio?

En esta zona del océano son muy frecuentes las tormentas tropicales, por lo que la meteorología parece  ser una de las principales causas de la desaparición o hundimiento de embarcaciones. Un estudio reciente realizado por la Universidad de Southampton ha desvelado la existencia de un tipo de oleaje bastante particular en la zona: se forman olas extremadamente altas (casi 30 metros de altura) que duran muy pocos minutos. Son lo suficientemente grandes como para derribar casi cualquier tipo de barco, incluso avionetas que sobrevuelen a poca altura.

No sabemos  a ciencia cierta la causa de estos incidentes, pero sí sabemos algo: no son por motivos paranormales, sino que están provocados por fenómeno natural y comprobable por la Ciencia.