Uno de los gases más conocidos que existen es el gas metano. Este gas es incoloro, inodoro y no es soluble en agua. No es tóxico pero es altamente inflamable. Por lo que se ha hecho tan conocido en los últimas décadas no es por sus propiedades, sino por el impacto negativo que está teniendo sobre el Medio Ambiente. No es el gas que más contamina, puesto que le gana el dióxido de carbono, pero el metano es el que tiene más potencial de calentamiento de los dos y, por tanto, es mucho más agresivo.
En Ciencia Divertida nos hemos interesado en conocer un poco más acerca de este gas y de dónde proceden sus emisiones. Existen dos fuentes principales de gas metano: cuando la materia orgánica se descompone (por ejemplo, restos de plantas, seres vivos, etc) emite gas metano, en ausencia de oxígeno. Estas emisiones son naturales, es decir, no las provoca la actividad humana.
La segunda (y más sorprendente de las dos) es la que procede de las explotaciones agropecuarias y, en concreto de rumiantes, como son las vacas.
Por alucinante que parezca, las vacas son uno de los principales catalizadores de las emisiones de gas metano a la atmósfera. Cada día se estima que una vaca libera entre 113 y 189 litros de metano, según datos de Joint Global Change Research Institute y la NASA.
Una de las primeras preguntas que nos hacemos es ¿por qué las vacas liberan tanto gas nocivo? La respuesta es clara. En el siglo XX la explotación ganadera en todo el mundo creció rápidamente, hasta convertirse en la principal fuente de ingresos de muchos países. Cada vez se consume más carne de ternera, por lo que las ganaderías deben criar a más animales, alimentarlos más rápido y prepararlos para el consumo. Muchos de estos ganaderos alimentan a sus reses con pastos en los que los fertilizantes están presentes, para favorecer el rápido crecimiento del césped. Estos productos químicos afectan a las digestiones de las vacas, lo que provoca que expulsen más gases de lo normal.
Pero ¿cuántas vacas hay en el mundo como para que se convierta en un problema? Según la investigación de Joint Global Change Research Institute en la actualidad hay alrededor de 1500 millones de vacas en el mundo. Esto se traduce en unos 115 millones de toneladas de gas metano al año que son expulsados por las vacas.
Este tema es uno de los más interesantes y, a la vez, de los más preocupantes para nuestros expertos sobre Medio Ambiente. Si a vosotros también os interesa y queréis conocer más acerca de ello podéis escribirnos a galicia@cienciadivertida.es. ¡Volvemos muy pronto!