Durante el verano es posible que estéis pasando unos días en la playa, en el pueblo, en el campo o tal vez os quedáis en la ciudad. No pasa nada. Cualquier escenario es bueno para apreciar la magia de la Naturaleza que nos rodea, especialmente ahora que los días son más largos y las noches son cálidas (y no hay que madrugar para ir al cole, admitámoslo)
Estos días estamos siendo testigos de noticias sobre las lluvias de estrellas, el eclipse lunar, el eclipse solar…Parece como si, de pronto, todo brillase en la oscuridad. Y es que no sólo podemos apreciar luz en el cielo nocturno, sino que aquí mismo, a nuestro alrededor, estamos rodeados por numerosas especies que desprenden cierto brillo.
Este fenómeno se conoce como bioluminiscencia, y consiste en la producción de luz por parte de un organismo vivo tras la reacción química de una proteína llamada luciferina.
- Luciérnagas: seguro que al pensar en un animal que brille el primero que se os ha venido a la mente ha sido este pequeño insecto. Y no es para menos, pues las luciérnagas son uno de los insectos más populares en esta época del año, ya que se dejan ver más. La luciérnaga cuenta con un órgano especial que es el que produce la luz de su cola, y la emplean para atraer a su pareja al emitir luz. Existen más de 2000 especies diferentes, por lo que los brillos que emanan de sus colas pueden ser diferentes.
- Medusas: en concreto, la medusa gelatina de cristal o Aequorea victoria. Este tipo de medusa es originaria de la costa occidental de Norteamérica, donde se caracteriza por emitir una brillante luz que pasa del azul a un tono verdoso en pocos segundos, provocado por la proteína verde fluorescente.
- Rape: no hace falta irse muy lejos para encontrar una especie de animal marino que brilla en las profundidades del Océano. Este pescado se caracteriza por tener sobre su cabeza una especie de “antena” que termina en una luminosa bolita. Su principal función es servir como cebo a sus presas, que se dejan atrapar por la luz que sale de esta protuberancia.
- Tiburones: resulta que más de la mitad de los animales marinos presentan esta proteína luminosa, por lo que no es de extrañar que alguna de las especies de tiburón que existen también cuenten con ella. En concreto hablamos del tiburón linterna o tiburón cigarro. Este último se caracteriza por tener toda la parte inferior de su cuerpo cubierta de fotóforos que protegen la luz, a excepción de su cuello.
- Milpiés: este pequeño gusano es un invertebrado luminiscente. Como la mayoría de animales con un rasgo de este tipo el milpiés lo utiliza como advertencia para sus enemigos, de forma que éstos comprendan que es un invertebrado altamente peligroso por el veneno tóxico que contiene.
Existen muchas más especies luminiscentes, como calamares, insectos, gusanos… Si os interesa el tema y os apetece que profundicemos más en él dejadnos un comentario y nuestro departamento de Biología de Ciencia Divertida realizará una profunda investigación al respecto.