En el reino animal, como ya sabéis, existen miles de especies sorprendentes, cada una con algún rasgo especial que la hace única. Uno de esos animales fantásticos y que no nos cansamos de observar es el camaleón.
Este reptil pertenece a los saurópsidos escamosos, y desciende directamente de los dinosaurios, por lo que su origen se remonta a la Era Paleozoica. En la actualidad existen más de 150 de especies de camaleones, y la gran mayoría reside en el continente africano.
Puede que este animal sea uno de los más curiosos que existen en el mundo, y por eso es tan popular. Entre sus principales características está la capacidad de cambiar su piel de color, su larga y veloz lengua y sus ojos, los cuales se mueven de forma independiente. Vamos a analizar estos rasgos uno a uno, para comprenderlos mejor:
Cambio de color: Muchas especies de camaleón tienen la capacidad de cambiar de color. Pero, a diferencia de lo que la mayoría de la gente cree, no lo hacen dependiendo del espacio en el que se hayan, sino que su cambio de color responde a alteraciones de temperatura o si se encuentran en una situación de peligro, para eludir a sus enemigos. Muchas veces el cambio de color de la piel de los camaleones es la respuesta a una pelea entre rivales, en la que se quiera mostrar enfado, miedo o furia.
Las células pigmentarias del camaleón se distribuyen por las diversas capas de la dermis, donde se pueden encontrar los cromatóforos, guanóforos o melanóforos. Cada una de estas células contiene pigmentos y sustancias que reflejan y regulan la luz. Las células son capaces de controlar cómo se distribuyen los pigmentos, dando lugar a los dibujos y tonos tan característicos de los camaleones.
La rápida lengua: otro de los rasgos inconfundibles del camaleón es su larga y veloz lengua. En una centésima de segundo es capaz de pasar de 0 a 96 km/hora y, dependiendo de la especie de camaleón, puede alcanzar un metro de longitud. El extremo exterior de la lengua, más pegajoso, es el lugar en el que quedan atrapados los insectos y otros pequeños animales, que son ingeridos al momento.
Los ojos – cámara: la habilidad de mover los ojos en todas direcciones les proporciona una elevada capacidad para percibir la profundidad y analizar el entorno. Cada ojo, que sobresale de la cabeza como si de un globo se tratase, está recubierto por un párpado que deja sólo al descubierto un pequeño círculo central, en donde se encuentra la pupila y el iris.
Como la mayoría de reptiles los camaleones deben mudar la piel de forma periódica. Su dermis, extremadamente dura y resistente, contiene una alta cantidad de queratina, por lo que se mantienen protegidos.
Aunque en los periodos de apareamiento se juntan con otros de su especie, los camaleones se caracterizan por llevar una vida solitaria y calmada. No cazan activamente, sino que esperan a que la presa se pase ante ellos. Los insectos y otros animales de tamaño muy pequeño suelen ser la base de su dieta, así como la fruta.
El departamento de Biología de Ciencia Divertida Galicia continuará investigando acerca de este fantástico reptil. ¡Estad atentos a próximos artículos!