Llega el verano, el buen tiempo, el sol… y, como no tengas cuidado, las quemaduras.

Los médicos y farmacéuticos recomiendan aplicar un fotoprotector con un factor mínimo de 30, ya que venimos del confinamiento, de una temporada algo alejados del sol, y eso puede hacer que estemos más sensibles.

Pero, ¿qué quiere eso de factor 20, 30… 50? El número que se indica en el envase se refiere al efecto protector del producto frente a la radiación UVB. Es decir, el FPS (Factor de Protección Solar) indica el tiempo que se puede permanecer al sol con la piel protegida en comparación con la piel sin protección hasta la aparición de un eritema, antes de quemarse.

Así que, si por tu tipo de piel, tardas unos 10 minutos en quemarte cuando no llevas crema, con un factor 30 tardarías unos 300 minutos. Parece bastante tiempo, ¿verdad? Pero, ¡ojo! , esto varía en función del lugar donde estés (ten en cuenta que la arena, el césped, el agua o la nieve reflejan la radiación), la altitud o si te mojas.

Hay productos que nos protegen bajo el agua, pero no son todos iguales: pueden ser resistentes al agua, water resistant, (soportan unos 40 minutos bajo el agua) o impermeables, waterproof (soportan unos 80). Sin embargo, aunque nuestro fotoprotector ofrezca una de estas dos características, se aconseja repetir la aplicación después del baño y cada dos horas… por si acaso.

¿Filtros físicos o filtros químicos? Los físicos son sustancias inorgánicas que actúan como pantalla y reflejan la radiación. Los químicos son compuestos orgánicos aromáticos que pueden absorberla. Muchos de los fotoprotectores que vas a encontrar tendrán ambos, fíjate bien en el envase.

¿Y los rayos UVA? La radiación ultravioleta A puede provocar alergias, arrugas (fotoenvejecimiento) y está relacionada con el cáncer de piel, así que, asegúrate de que sus siglas estén en el envase de tu fotoprotector.

Y, ¿qué es lo mejor para los niños? Para los que tengan menos de 6 meses… 0 sol; su piel es especialmente sensible, así que debe estar siempre a la sombra. Hasta los 3 años, se aconsejan filtros químicos y a partir de los 3 los productos que mezclan filtros químicos y físicos.

¿Algo más a tener en cuenta? Pues sí… debemos evitar las horas centrales del día (de 11 a 17), llevar gafas de sol, aplicar el producto de forma uniforme, beber abundante agua, no ponernos colonia y tener en cuenta que algunos medicamentos pueden provocar aumento de sensibilidad en la piel.

Crema, spray, barra, fluido…¿bruma? Sea como sea, ponte protector.

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